Hacia dónde y cómo

Hacia dónde y cómo

lunes, 13 de diciembre de 2010


Al estar recostado sobre mi cama desnudo,
con la leve luz de mi lámpara,
sintiendo un pequeño escalofrío al tocar mis pies
-uno frío y otro un poco caliente-, no
puedo evitar el recuerdo de ver su cuerpo
tendido y desnudo sobre la misma cama,
con la misma luz tenue, las sombras, sus ojos
y su cabello cubriendo mi almohada.
Sí, es cierto, puede que la extrañe hoy
más que antes y también puede que sea cierto
que necesite -no su cuerpo, sino...-, que precise
su voz, su sonrisa, un silencio para poder romperlo
con alguna idea que pase por mi cabeza, volver a
sentir que existe algo, que las cosas son...
aunque no sepa bien que.

3 comentarios:

Adriana Naranjo dijo...

volver a sentir que existe algo, que las cosas son... son qué?

Unknown dijo...

Diay que las cosas son...no todo tiene nombre a veces las palabras no logran definirlo todo

Adriana Naranjo dijo...

la incertidumbre de creer que si pero que tal vez no

Emociones

Las emociones que invaden mi espíritu son cada día más grandes y fuertes, me siento poseído por el placer, me siento atraído por el vicio, deshecho por el amor y vuelto a la vida por la libertad de haber podido escoger ese camino por el que voy hoy…
El mundo que creíamos ver no es ni la mitad de hermoso que ese universo que se esconde en nuestras miradas, en nuestras mentes. Ese animal que se esconde en nosotros, solo escapa cuando al fin dejamos las apariencias, dejamos a terceros por fuera y solo así podemos sentir, vivir como en verdad deberíamos. En realidad sentiríamos la realidad si nos dejáramos caer por una sola vez, cree en esos sueños, en esas ilusiones y en ese momento romperíamos el cristal y la realidad sería una vez más debajo del mar, la Luna sin explotar nos quemaría y arderíamos en fragmentos que al tocar el aire se hacen uno, convirtiéndonos en estrellas fugaces que atraviesan el cosmos.